Los Momentos Más Allá de lo pre pactado tienen ese sabor de lo inesperado minuto a minuto. José Luis se encarga de mantener una chispa constante, atrapante y una de esas cuestiones que él hace para sacudirnos y despertarnos a más de uno, es invitarnos a cambiar de Lugar, como lo hizo el día de su Cumpleaños, que ya les contaré en esta Anécdota, y como hizo esa tarde de sábado post almuerzo en el bello parque de La Sutil al invitarnos a mojar nuestros pies en la pileta -o como lo llaman en otros países también; piscina-.
Mientras algunos Compañeros iban a buscar el champagne más delicioso de todos, algunos nos sentábamos en el borde de la pileta y otros iban llevando las copas, José Luis se sentó también en el borde de la piscina y al sentarse rompió una copa, accidentalmente.
En Momentos Más Allá de lo pre pactado, si algunos rompemos algo, a cambio, tenemos que compensar comprando lo roto “y algo más”, pues en algo tan simple como una rotura de un plato o de un termo, pueden Leerse infinidad de cuestiones Sutiles que gestaron ese “acto” en lo denso. Pero en esta ocasión, José Luis no se limitó a ese Referente si no que, como lo hace cada vez, Aplicó Método en lo que sucedió: inmediatamente, José Luis nos dijo a quienes estábamos ahí cerca, que la copa que él rompió fue la copa de Marcela -una copa con las iniciales de Marcela talladas, que oportunamente habíamos obsequiado-, y nos contó cuestiones personales por las que en esos días ellos estaban pasando -que no viene al caso detallar acá-, y que entonces no fue “porque sí” que se haya roto “justo” la copa de Marcela.
Primero, que ante una falla, se ubique abiertamente la lógica Metódika que hay… no conozco a otra persona que lo haga en su Vida con tanta precisión como lo hace JL. Todos fallamos, ¿quién no? Pero lo importante es qué hacer ante la falla.
Pasadas unas horas, en el Momento de la cena, en el precioso quincho de La Sutil y en una noche perfecta, José Luis propuso dar lugar a uno de los proyectos artísticos que Marcela más está desarrollando en estos tiempos y en el que también estamos involucrándonos algunos Compañeros, Marcela aceptó con gusto. Allí compartimos novedades y avances al respecto, ¡y que muy, muy pronto todos ustedes podrán enterarse… y tal vez también participar!
Con brindis, entusiasmo y alegría compartida por las noticias y el crecimiento, ¡¡¡José Luis compartió algunas ideas y propuestas super enriquecedoras para aportar al proyecto!!!
A los pocos días, en una Sesión Analítica, José Luis nos mostró qué hizo en lo que hizo al respecto. Por qué dijo lo que dijo en la piscina ante el hecho de haber roto la copa de Marcela, por qué decidió darle lugar a hablar del proyecto de Marcela luego en la mesa. Ese día yo aprendí una de las Enseñanzas que más atesoro en mí: tomar la falla como Oportunidad.
Cuando yo era niña, si me metía en problemas, cuando no hacía lo que tenía que hacer, o hacía lo que no tenía que hacer, mis padres me retaban. Y está claro que lo hacían con “la mejor intensión”, pero las “soluciones” que proponen los viejos paradigmas, por más buenas intenciones que tengan, ¡no funcionan!
La Enseñanza, en cambio, me Enseña a que cuando aparece la falla, cuando me equivoco o ante una tempestad: estoy ante una Oportunidad. Una Oportunidad para profundizar, avanzar, crecer.
Una semana después de la historia de la copa que les conté, llegó el 13 de Marzo, ¡cumpleaños de JL! José Luis nos invitó a algunos Compañeros a conocer el futuro nuevo hogar del Cuadrado Mágico, pero antes… JL y Marcela nos citaron en su casa actual y juntos fuimos caminando a la que va a ser su nueva casa, o sea, ¡nos invitaron a cambiar de Lugar!
Al llegar a ese lugar tan maravilloso, muchísimo más elevado que el lugar anterior, con una vista inigualable, Julieta, una Aliada, y yo, en Ayny por todo lo que José Luis nos Enseñó con su Ejemplo de qué hacer ante la falla, le regalamos una copa idéntica a la que se había roto, con el nombre de Marce y también una copa que dice JL + un vaso para Thomy y otro para Luzyo, ¡Ayny que JL Valorizó muchísimo!
Eliana de Piero