Luego de UN precioso y emotivo momento cerca del Árbol en que le Hablamos a Olga B, como si ella estuviese ahí mismo, en presente y que hicimos el titular cerca del Árbol de Navidad alrededor del cual nos reunimos en las Fiestas…

Mario se acercó con una canasta, una canasta que era toda una sorpresa pues… ¡Estaba repleta de libros!

Hicimos una ronda alrededor de él y nos dijo que allí tenía Libros de la Biblioteca de Olga que él, en su nombre, nos dedicaba a cada quien.

Entonces, fue tomando cada libro, abriendo su tapa para encontrar la primera hoja en que había escrito muy dedicadamente “Para… de parte de Olga B”.

Se encargó Mario de elegir los libros para cada quien, los que mejor coincidieran en interés o algún detalle. Así es que en mí turno, Olga me dedicó a través de Mario un libro de Leonardo Da Vinci, El vuelo de la mente… Libro que tiene entre sus páginas notitas y papelitos de Olga.

A cada uno nos llegó un libro… Y a JL el libro con que eligió encontrarse fue el I Ching. Fue muy especial ese Momento.

Y de allí fuimos a la mesa a continuar un Ritual precioso dedicado a Olga, en Momentos con Escuela que JL se encargó de dirigir, integrando a quienes estamos en Enseñanza, y quienes no y son familia de Olga.

Un Ritual en el que JL integró rituales de diferentes lugares del mundo, tomando lo mejor de cada uno; y en el cual estuvo totalmente Receptivo y permeable a las propuestas

Tal es así, que en uno de los momentos luego de que contáramos anécdotas, momentos y Enseñanzas con Olga, JL consideró unas tarjetas que yo había llevado de suvenir con fotos de Olga con cada uno de nosotros y las integró al Momento, propiciando un Oráculo para recibir el mensaje de Olga… Y ¡realmente los mensajes que de ahí surgieron fueron muy claros y potentes!

¡Seguramente en esta misma editorial estarán relatados!

Muchas gracias a Olga por lo que recibo de ella de mensajes. Muchas gracias a JL por haber estado permeable a recibir propuestas durante el Ritual, usarlas y darles función.

Un Ritual que fue un Canto a la Vida y sorprendente sincronicidad entre planos.

Gracias, Olga, por propiciarme la Oportunidad que Aprenda también de Eso: ¡ponerle Vida a la Muerte! ¡Festejar la Vida y todos aprender algo!

 

Maryela Bianchi